Y llegó el final de esta primera mitad de temporada, que todo sea dicho, podría haberse reducido a 2 o 3 capítulos. En realidad este final tampoco soluciona nada, tan sólo añade un cambio sustancial respecto a los anteriores, y tiene que ver con la energía y los colgantes, pero seguro que todos nos lo esperábamos.
Comenzamos el capítulo con nuestros queridos amigos refugiándose en casa de un viejo amigo de Miles, de hecho el único que le queda en la ciudad (cosa que todos saben, razón por la que les dan caza enseguida). Miles se va a investigar las calles mientras Charlie se queda con el resto recuperándose de su chichón, pero Neville entra por la puerta y se los lleva a todos. Hay que ser poco inteligente (hablo de Miles) para hospedarse en casa de alguien que todo el mundo sabe fue tu amigo (encima su casa está muy cerca del metro) y Neville se encarga de demostrarles la estupidez de quedarse ahí. En fin, que se llevan a Charlie y se produce el reencuentro con su madre. A diferencia del reencuentro con Danny, Charlie no muestra ningún tipo de amor hacia ella, más bien intenta asimilar que aún está viva. Después se produce el reencuentro con Danny y amenazan a Rachel de matar a uno de sus hijos (de hecho la hacen elegir y todo) si no acaba el amplificador, y ella lo hace. Danny y Charlie son llevados de nuevo a la celda, pero consiguen escaparse y huir.
Mientras, Miles coge a Julia, la esposa de Neville, como rehén para intercambiarla por sus amigos, y Neville suelta a Nora y a Aaron y les manda a todos a la central eléctrica, donde están el resto de amigos. Aaron se queda en la puerta para montar una pequeña bomba y permitirles salir de allí, y Miles y Nora entran en busca de los niños. Ellos aparecen, pero como cuentan que Rachel vive, Miles va a por ella. En su vuelta hacia fuera se encuentra con Monroe y se produce una pelea bastante ilógica y sin chicha. Todos sabemos que son muy amigos y no van a matarse, y les cuesta 10 minutos (vale, quizás exagero) darse cuenta que ya no se quieren. Miles y el resto consiguen escapar, pero Rachel cometió un error muy grande en su huida: dejar el colgante conectado al amplificador. Y ahí tenemos el cliffhanger para que aguantemos los 4 meses de parón: un helicóptero sobrevolando la zona y apuntado directamente a Miles y los suyos con su metralleta.
En los flashbacks vamos viendo la relación de Miles y Monroe desde bastante antes del apagón, y cómo las circunstancias de sus vidas les han acabado convirtiendo en casi hermanos. Una lástima que ahora se tengan que matar el uno al otro.
Me reafirmo en lo que he dicho previamente de que estos 10 capítulos podían haberse reducido a 3 o 4 (el piloto, el final, y un par de capítulos para contar todo el camino), pero hacer temporadas de 22 capítulos (bueno, en este caso de 20) es lo que tiene, que hay que meter relleno. A ver si los 10 capítulos restantes nos traen una mejora (por lo menos sabemos que tampoco tienen demasiado margen para hacerlo peor).
Opinión de @Eric_MeGon
Me reafirmo en lo que he dicho previamente de que estos 10 capítulos podían haberse reducido a 3 o 4 (el piloto, el final, y un par de capítulos para contar todo el camino), pero hacer temporadas de 22 capítulos (bueno, en este caso de 20) es lo que tiene, que hay que meter relleno. A ver si los 10 capítulos restantes nos traen una mejora (por lo menos sabemos que tampoco tienen demasiado margen para hacerlo peor).
Opinión de @Eric_MeGon